¡Al agua patos!

8 marzo 2016
Aunque al principio darle un baño a tu bebé pueda parecer una gran tarea por todas las cosas que necesitas tener a mano, poco a poco, te resultará mucho más fácil. Será pan comido. Hoy respondemos a las preguntas más frecuentes. ¿Cada cuanto debo bañar a mi bebé? Esto dependerá de ti. Hay bebés a los que le encanta pasar un rato en el agua y darle un baño calentito a tu bebé puede convertirse en un ritual divertido y relajante. No quiere decir que tengas que bañar a tu bebé todos los días. Si acaba de nacer, un baño cada dos o tres veces a la semana podría ser suficiente. Es posible que cuando bañes a tu bebé sientas un pequeño temor y que quieras tener a alguien cerca para que te de algo de apoyo. En caso de olvidar algo que necesite tu bebé, puede ser muy útil ya que nunca deberemos dejarle solo en el baño. ¿Dónde bañarle? Existen bañeras especiales para bebés o adaptadores para bañeras de adultos. También existe la opción de una bañera plegable con las paredes blandas para evitar que el bebé se de algún golpe. ¿En qué momento del día? Busca un momento en el que no esperes interrupciones, en el que tu pequeño esté despierto y entre tomas, así no estará hambriento ni lleno. Nada más nacer, te puede resultar más fácil darle un baño durante el día pero con el paso del tiempo, introducirlo como parte de su rutina para dormir por las noches es una buena idea. Un baño caliente puede ayudar a tu bebé a sentirse más calmado y, de esta manera, le ayudará a dormir mejor. Además, es el momento ideal para disfrutar de un momento toda la familia. Antes de empezar con el baño, ¿qué necesito?
  • Un bol de agua cálida para limpiarle la cara a tu bebé.
  • Una esponja natural muy suave o una manopla de algodón.
  • Un jabón de baño que proteja su piel, específico para bebés, con pH neutro y poco perfumados.
  • Toalla, albornoz o toalla con capucha de algodón.
  • Un termómetro para medir la temperatura del agua, debería estar entre 34 y 37 grados.
  • A tu bebé le encantará chapotear y jugar en el agua. Sus juguetes deben ser seguros, sin piezas que puedan desprenderse.
  • Pañal y ropita preparados.
Ya casi estamos listos... No olvides cerrar puertas y ventanas para mantener el calor dentro de la habitación y evitar corrientes, la temperatura ideal sería entre 22 y 25 grados. Llena el baño con unos 20 cm de agua, más o menos a la altura de los hombros del bebé. Al salir, presta especial atención a los pliegues al secarle. Después, aplica algún aceite o leche hidratante y antes de poner el pañal, pon crema barrera específica para esta zona. Ahora si, ¡al agua patos!