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La sudamina en bebés

Los días de calor ya están aquí, esos días en los que los pequeños comienzan a sudar. Esto puede llegar a causarles una afección causada por la inmadurez de las glándulas sudoríparas conocida como la sudamina. Esta afección es muy común en los bebés menores de 1 año. Principalmente porque existe una obstrucción de los poros, pues el sudor se queda retenido en la glándula sudorípara. Esto suele ocurrir con más frecuencia en lugares donde el clima es demasiado húmedo. ¿Cuáles son los síntomas? Si a tu bebé le aparecen algunas zonas enrojecidas, pequeñas ampollas o tacto rugoso en la piel es posible que se deba a esta reacción en su delicada piel que suele manifestarse principalmente en las zonas que las zonas donde el sudor suele ser más abundante como los brazos, pecho, espalda, nuca… Los niños suelen estar más irritables y nerviosos, patalean, agitan los brazos… ¿Cómo podemos evitarlo? En primer lugar, lo más importante es intentar que los bebés no pasen calor y suden en exceso. Para ello, no hay que pasarse abrigando a los pequeños con demasiada ropa ni tapándoles más de lo que necesitan ya que en muchas ocasiones los papás solemos abrigar a los bebés más de lo que realmente necesitan por miedo a que cojan frío y esto puede producir reacciones en la piel. Ten en cuenta que el bebé no necesita más abrigo que el que tu necesitas. Otra medida con la que podemos prevenir la aparición de sudamina este verano es asegurarnos a la hora de comprar ropa para el bebé es que esté siempre confeccionada con tejidos naturales como por ejemplo el algodón ya que permite una transpiración adecuada. Además, debemos procurar que la ropa no quede demasiado ajustada. Durante el verano tendremos que prestar especial atención al pañal de nuestro bebé, cambiándolo frecuentemente. La higiene será fundamental durante esta etapa ya que al bañarle eliminaremos restos que puedan quedar en la piel y, además, le ayudará a refrescarse. Lo más efectivo será mantener fresco a tu pequeño este verano, podemos utilizar el aire acondicionado o el ventilador pero, ojo, a una temperatura moderada. Mantener aireada la habitación del bebé también evitará que sude demasiado. Si quieres saber más sobre cómo mantener fresquito a tu bebé y cómo puedes ayudarle a que el calor no dificulte su descanso este verano, no te pierdas este post. No lo olvides, evitando los factores que provocan el exceso de calor y sudoración, podemos prevenir la sudamina 🙂

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