El síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) es uno de los temas que más nos preocupa a los padres. Tras décadas de estudio todavía no se conocen las causas por las que se produce. Sin embargo, gracias a la investigación y a la puesta en practica de unos sencillos consejos, el número de fallecimientos se ha reducido considerablemente, pero ¿qué es y por qué se produce el síndrome de la muerte súbita del lactante?
Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), en su ‘Libro Blanco de la Muerte Súbita Infantil’, el síndrome de la muerte súbita del lactante (SMSL) se define como la “muerte súbita de un niño de menos de un año de edad, que ocurre aparentemente durante el sueño y que permanece sin explicación después de la realización de una minuciosa investigación postmortem, que incluye la práctica de la autopsia, examen del lugar del fallecimiento y revisión de la historia clínica».
Hoy en día, el SMSL sigue siendo una de las principales causas del fallecimiento de los recién nacidos o niños menores de un año. Según los datos de la AEP «entre los países desarrollados, las tasas de SMSL varían ampliamente. Así, en los Estado Unidos las tasas son aproximadamente dos veces superiores entre los bebés de madres afroamericanas o de la India en comparación con las madres de origen caucásico. El aumento de riesgo de SMSL también se observa en los maoríes de Nueva Zelanda, los aborígenes australianos y los de ascendencia mixta en Cabo Town, Sudáfrica».
Por lo que respecta a España, la verdadera incidencia de la muerte súbita no está bien establecida ya que son escasos los estudios sobre este tema. Cogiendo la tasa de mortalidad publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) entre 1985 y 1995 esta incidencia era del 0,3%-0,4%.
¿Por qué se produce el síndrome de la muerte súbita del lactante?
Entre las diferentes teorías existentes para explicar el SMSL, hay que señalar que la del triple riesgo propuesta por Filiano y Kidnney es una de las más extendidas. Según esta hipótesis, «la muerte se produciría cuando en un lactante de forma simultánea inciden tres circunstancias con interacción de factores genéticos y ambientales». Según esto deberán coincidir el hecho de ser un lactante vulnerable, pasar por un periodo crítico del desarrollo y un factor externo de estrés (que en un lactante vulnerable actúa como desencadenante).
Los factores de riesgo que producen la muerte súbita del lactante se dividen, según la Asociación Española de Pediatría, en dos categorías: intrínsecos o extrínsecos. Los factores intrínsecos, definidos como factores genéticos; polimorfismos; o ambientales que afectan la susceptibilidad (la raza afroamericana, sexo masculino, la prematuridad y la exposición materna prenatal al tabaco o al alcohol).
Mientras que los factores de riesgo extrínsecos que se definen cómo un factor de estrés físico próximo a la muerte que puede aumentar el riesgo. Ejemplo de ello es la posición para dormir boca abajo/lateral; cara boca abajo cabeza cubierta; dormir en un colchón de adultos, sofá o parque infantil; ropa de cama blanda; colecho y signos de infección del tracto respiratorio superior. El tabaquismo materno también puede considerarse como un factor de riesgo externo, sobre todo si se acompaña de colecho.
Consejos para disminuir el riesgo de SMSL
Entre los consejos que los expertos recomiendan para reducir los riesgos de que nuestro bebé sufra el síndrome de muerte súbita del lactante están:
- Llevar un control durante todo el embarazo del estado de salud tanto de la madre como del bebé
- Nuestro bebé tiene que dormir sobre un colchón firme, nunca sobre una superficie blanda
- Acostarlo boca arriba
- El colchón se debe cubrir con una sábana bien ajustada y ninguna otra ropa blanca. Además, debemos mantener los objetos blandos lejos del bebé, mejor si en la cuna no hay nada
- Tampoco se deben usar protectores acolchados (chichoneras) ya que pueden sofocar o estrangular al bebé si se enreda con ellos
- La temperatura tanto de la habitación como del bebé es importante. Debemos comprobar que no está demasiado abrigado al dormir
- La habitación donde duerma el bebé o el coche debe estar bien ventilado para que no respire aire con exceso de CO2
- Evitar, en la medida de lo posible el colecho o realizarlo siguiendo todos los consejos. Lo más recomendable es que nuestro bebé duerma en la misma habitación, pero en su moisés, minicuna o cuna
- La lactancia materna reduce considerablemente el riesgo de SMSL, así como vacunarle correctamente
- Ofrecer el chupete (sin correa) mientras duerme y siempre que lo admita. Si una vez dormido lo tira no hace falta volvérselo a poner
- No fumar durante el embarazo ni tras el parto, así como no consumir alcohol u otro tipo de drogas
¿Conocías las causas y recomendaciones?
