BabyKeeper® reduce el riesgo de muerte súbita del lactante mientras duerme por factores externos al bebé.

BabyKeeper es el resultado de la mayor investigación en Europa para minimizar los riesgos asociados a factores externos que pueden afectar a tu bebé mientras duerme.

Según la hipótesis del triple riesgo, el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL) se produce con la superposición de tres factores de riesgo: un bebé vulnerable, un periodo crítico del desarrollo y un factor externo de estrés desencadenante.

Bebé vulnerable

Lactante con algún tipo de vulnerabilidad genética, del metabolismo, del sistema nervioso, del corazón.

Período crítico

Lactantes de entre uno y diez meses de edad.

Bebé vulnerable

Sobrecalentamiento, reinhalación de CO2, fumar durante el embarazo, colchón demasiado suave, dormir boca abajo,….

Todo lo que reivindicamos, ha sido testado en laboratorio con bebés reales, y en caso de no ser posible, utilizamos tecnología de vanguardia que simula el comportamiento real de un bebé en situación límite.

Reinhalación de CO2

La falta de oxígeno por exceso de co2 en el aire durante los primeros meses de vida puede tener consecuencias gravísimas en el desarrollo del cerebro, generar problemas respiratorios, en el sistema nervioso central e incluso la muerte súbita en el peor de los casos.

El nivel de concentración de co2 generado por el propio bebé en una cuna convencional es alarmantemente alto. Empujado por el peso de su composición, el co2 se acumula sobre la línea respiratoria de tu bebé, elevando el riesgo de asfixia por concentración de co2 si este se acumula más allá del 5%.

Por este motivo en Babykeeper creamos ERMA® un material altamente permeable al aire que permite que el co2 caiga por su propio peso, disipándose de la nariz y la boca del bebé y manteniendo así niveles de concentración de CO2 siempre por debajo del 3.5%.

Nota importante

En nuestras pruebas de laboratorio llegamos a medir concentraciones superiores al 20% de CO2 dentro de las cunas y minicunas en muy poco espacio de tiempo, de modo que mucho cuidado por favor con producir una cámara de aire alrededor de una cuna del bebé, es decir, hay que evitar barreritas que no dejen pasar el aire hacia abajo y hacia los lados, así como minicunas y cunas rodeadas de textiles protectores, fundas impermeables que cuiden al colchón y no cuiden ni la respiración ni el flujo térmico del bebé.

Sobrecalentamiento

El exceso de calor es uno de los riesgos exógenos más importantes que hay alrededor de la muerte súbita del lactante. Cuando un bebé sobre todo durante los primeros mesecitos pasa un poquito de calor, para él es un estrés desde el punto de vista de la gestión del calor. 

Mientras que los adultos contamos con un sistema termorregulador maduro que nos permite controlar la temperatura corporal a través de respiración y transpiración, el de los bebés está todavía por desarrollar, por lo que un exceso de calor les genera un gran estrés en su ya de por sí alta frecuencia cardíaca. Un golpe de calor acarrea la pérdida del ritmo de las señales vitales, provocando daños cardíacos y cerebrales que pueden desembocar en la muerte súbita.

Babykeeper cuenta con dos características que lo hacen idóneo para prevenir el riesgo de sobrecalentamiento del bebé. Primero; un diseño extraordinariamente transpirable que no ofrece resistencia al flujo de aire por su interior, y segundo; que el propio material es ligeramente conductor y absorbe el exceso de calor del bebé y disipándose entre todo el material de su interior.

Gracias a estas dos propiedades BabyKeeper ha demostrado en laboratorio que a diferencia de los materiales como el HR, viscoelástica o látex, BabyKeeper no acumula temperatura y evita que el bebé se sobrecaliente por encima de temperaturas que conllevan riesgos.