¿Conoces el efecto de Mozart?

Se trata de un método basado en la teoría Don Campbell en la que se asume que el sistema auditivo de un bebé se desarrolla al quinto mes de embrazo. Es a partir de este mes donde el bebé comienza a responder a los estímulos sonoros. Pero, escuchar a Mozart ¿Los hace más inteligentes?

La música clásica ha servido a lo largo de la vida una serie de beneficios para el ser humano, es este caso, para los bebes, especialmente con efectos relajantes la obras compuestas por el famoso compositor Wolfgang Amadeus Mozart han tenido un efecto muy particular en lo bebés incluso en la fase de gestación.

Varios estudios revelan que, particularmente las composiciones de Mozart son las que más relajan a los bebés. El investigador Don Campbell, fue un investigador que consiguió estimular al bebé dentro del vientre de la madre a través del uso de la música, generando unos beneficios para los adultos y concretamente para los bebés.

Según la teoría de Campbell el sistema auditivo de un bebé se desarrolla durante el quinto mes de embrazo. Es en este momento, donde el bebé comienza a estimularse respondiendo a los estímulos sonoros.

Se considera que la música de Mozart ayuda a relajar a los bebés y pueden ayudar al desarrollo, la capacidad de concentración y creatividad tal y como se ha demostrado en estudios posteriores (Universidad de Viena), sin embargo, estos contradicen la afirmación de que las melodías de Mozart mejoran la inteligencia de los bebés. Actualmente, no hay pruebas tangibles que la música actúe sobre el aumento de capacidad de inteligencia en los niños.

No obstante, existen muchos beneficios para el bebé escuchar la música de Mozart, a continuación, te explicamos algunos de ellos:

• Desarrolla la capacidad de recepción del cerebro. Esto viene dado por la frecuencia de los instrumentos musicales utilizados y la cadencia de las piezas compuestas por Mozart podrían hacer más receptivo el cerebro en determinadas zonas del hemisferio derecho.
• Estimula el cerebro activando las neuronas. Gracias particularidades como la armonía de las notas, la cadencia, el sonido de las obras de Mozart estimulan la atención y la memoria.
• Promueve la capacidad de concentración de los bebés. Puede mejorar su capacidad de concentración en lo que están haciendo si acostumbramos a los niños a escuchar de fondo música de Mozart.
•  Estimula el ritmo cardíaco del feto generando endorfinas y fortaleciendo el vínculo entre el bebé y la madre.

Por último, varios estudios señalan que la música de Mozart ayuda a estimular el sueño del bebé. No hay mejor manera que utilizar este tipo de composiciones lenta para comprobar el Efecto Mozart y confirmar si realmente funciona con tu bebé.

Con todo, ha sido la psicóloga Frances Rauscher de la Universidad de California la que ha afirmado que no existe certeza científica de que pueda incrementar la inteligencia, ningún tipo de música.