Si estás embarazada, estas Navidades serán de las más especiales de tu vida, aunque las del año que viene lo serán todavía más. Durante el embarazo es importante mantener una dieta sana y equilibrada. Debemos mejorar la calidad de los alimentos que ingerimos e intentar evitar pasarse de peso y las digestiones pesadas.Durante estos días, en los que la gran parte de celebraciones tienen lugar alrededor de una mesa repleta de manjares, tendrás que hacer un esfuerzo y controlar los excesos propios de estas fechas. En Navidad, al igual que a lo largo de todo el embarazo, no hay que perder de vista los alimentos prohibidos. Cualquier alimento crudo supone un riesgo, en concreto pescados y embutidos, sobre todo si la mujer no está inmunizada contra la taxoplasmosis. En cuanto a los pescados, no se admiten crudos, ahumados, preparados en vinagre y los marinados. Es aconsejable suprimir los productos de charcutería no cocinados como por ejemplo el foie-gras, patés o el clásico jamón serrano… Aunque sabemos que no es lo mismo, se permite el fiambre de pavo y jamón york. También debes tener cuidado con los lácteos no pasteurizados, no están admitidos en la dieta de las embarazadas. Ojo con el queso feta, brie, camembert… Se recomienda evitar la cafeína, en lugar de tomar café o té puedes sustituirlos por infusiones de manzanilla o hierbabuena. Lo más importante, la recomendación del consumo de alcohol es cero, lo mejor es prescindir de él totalmente durante la gestación. Darse algún capricho está bien pero no conviene abusar de los dulces y pasteles. Si nos apetece algo dulce, toma un postre a base de fruta. La piña es una opción ideal, rica en fibra y te ayudará a hacer la digestión. En la medida de lo posible procura mantener los horarios de las comidas dentro de lo habitual, cumple con las cinco comidas y así evitarás llegar a la cena con hambre y pegarte un atracón, controlando más aquello que puedes comer y lo que no. Sabemos que esto puede ser un fastidio pero recuerda que existen muchas otras opciones igual de deliciosas: mero al horno, bacalao en salsa, pavo asado, cordero, puré de manzana… ¡Deja volar tu imaginación! Al fin y al cabo, se trata de evitar los empachos y adecuar los menús a tus necesidades. Recuerda que un buen descanso para la embarazada es fundamental, intenta dormir bien y descansar lo suficiente para evitar la sensación de cansancio y así poder disfrutar de las reuniones con familiares y amigos. ¡Que aproveche! Feliz Navidad ☺ Imagen: Maternity and Infant