La natación para bebés es una de las mejores terapias de estimulación
Diferentes son los objetivos que los padres persiguen al estimular al bebé con la matronatación, hay que señalar que en estos primeros años no aprenden a nadar sino a familiarizarse con el agua y a flotar. Entre ellos están el prevenir el ahogamiento ya que aprenden a flotar, aunque todavía no son capaces de levantar bien o sacar completamente la cabeza del agua. Debemos tener en cuenta que hasta que cumplen un año tienen intacto el ‘reflejo de inmersión’.
Sin embargo, no todos los pediatras son partidarios de la iniciación temprana en la natación. Según explican puede existir alguna contraindicación. Por ello, deberemos estar atentos a nuestro bebé por si pudiera desarrollar alguna de ellas. Entre las contraindicaciones que señalan están la posibilidad de sufrir piel atópica, otitis externas u otitis media con perforación timpánica. Es por ello que recomiendan consultar con médicos o matronas la idoneidad de realizar estas actividades con nuestro bebé.
Como explican otros profesionales, la natación para bebés es una de las mejores terapias de estimulación ya que entre los bebés aumentan la habilidad de los músculos, los huesos y la coordinación corporal con la natación. Con esta actividad también se fomenta el autoconocimiento del cuerpo.
Al ser un juego para nuestro recién nacido estimulamos, a través del chapoteo, el sentido del tacto y se enriquecen sus experiencias motrices ya que las actividades se pueden realizar con música, que facilitará el ritmo y la coordinación.
La capacidad respiratoria de nuestro hijo también se verá beneficiada, la natación fortalece el corazón y los pulmones. Gracias al trabajo respiratorio que se realiza en el agua ya que aumenta la eficiencia en la oxigenación y traslado de la sangre. También se favorece la capacidad de resistencia a los cambios de temperatura o de medio. Además, diferentes estudios han demostrado que la estructura ósea se desarrolla más rápidamente que la de otros niños que no están acostumbrados a estar en el agua.
Beneficios no solo físicos
Entre las capacidades que nuestro bebé desarrollará está la conciencia y la capacidad de salir de las dificultades ya que aprenden de forma temprana a reaccionar con prontitud ante un estímulo. Los recién nacidos ganan en seguridad y confianza. Está demostrado que el coeficiente intelectual también aumenta ya que el recién nacido desarrolla una percepción mayor del mundo que los rodea.
El desarrollo psicomotor es otro de los beneficios ya que nuestro bebé tiene la posibilidad de moverse tridimensionalmente y comienza a tener nociones de desplazamiento y distancia, favoreciendo la coordinación motriz.